Técnicas, dieta y remedios para combatir la celulitis
La celulitis o piel de naranja es la acumulación de grasa bajo la piel en determinadas partes del cuerpo. Afecta a todas las mujeres con independencia de peso o edad. Normalmente las zonas mas afectadas son las nalgas y las piernas pero también puede aparecer en brazos y vientre. Es una de las principales preocupaciones estéticas en la mujer ya que la aparición de esos antiestéticos surcos sobre la piel es una pesadilla que cuesta eliminar. Sin embargo hay remedio. No desesperes porque aunque el verano está a la vuelta de la esquina, puedes acabar con ella, o al menos mitigar sus signos.
La alimentación
Debes evitar el sobrepeso.Y el abuso de platos precocinados, quesos, azucares, fritos y cualquier alimento que contenga caseína. La carne magra, las verduras frescas, el pescado azul y los arroces son sin embargo tus principales aliados.
El deporte
La práctica de la actividad muscular favorece la eliminación de la piel de naranja porque se refuerzan los músculos profundos y los superficiales. Además se mejora la circulación sanguínea.
La nutricosmética
En el mercado existen numerosos productos que sirven para eliminar la grasa acumulada. Te recomendamos también que pruebes con productos drenantes que eliminan el exceso de líquidos como el té verde, la cafeína, el mate, la achicoria, el ortosifón, la castaña de Indias o el vino tinto. Además puedes utilizar los quemadores de grasas que se venden como producto específico y se aplican directamente sobre la piel y tienen un efecto calor.
Los tratamientos mecánicos
La presoterapia es uno de los tratamientos mas utilizados. Actúa como un drenaje linfático. Se realiza con una máquina de aire pulsado que hincha de forma progresiva y ascendente un par de botas, que cubren desde los pies hasta la parte superior de las piernas. El objetivo es activar la circulación venosa y linfática. La presoterapia se aplica en sesiones de unos 40 minutos y es también eficaz contra la retención de líquidos.
La mesoterapia que consiste en inyectar de forma subcutánea productos que actúan sobre la grasa acumulada. Se recomienda sobre todo en casos de problemas circulatorios y celulitis difusa.
Los métodos más recientes utilizan las corrientes eléctricas, los ultrasonidos o los infrarrojos. Se aplican gracias a unos electrodos que se colocan en las zonas que se quieren tratar. Este procedimiento consigue tres efectos: se aumenta la temperatura de los tejidos, la permeabilidad celular de los adipositos y se desfibran los tejidos presentes en la hipodermis.